10.04.2009


En un momento yo tampoco pude seguir. Mi mente colgó, imaginando el comienzo de una película en ese mismo instante. Mi pensamiento como protagonista, una voz over, la música en vivo de fondo.
Incluso los errores. Todo incluído en el paquete, un show de hiperrealidad, casi un simulacro.
Parecemos la novela de las 8, ni siquiera la de las 3 de la tarde. La novela importada de Brasil que pasan en el canal con menos rating.
¿Pero es eso la vida? Vivir lo que nace espontáneamente de mí, que no es lo mismo que no tener proyectos. Renunciar a hacer las cosas sin ganas me parece lo suficientemente valiente. O no, me parece valiente, pero no suficiente, ese el problema. ¿Por dónde empiezo?, ¿dónde está el manual de instrucciones?